La Embajada argentina en México lamenta profundamente la desaparición física de Carlos Fuentes, quien falleció este martes 15 de mayo a los 83 años en la Ciudad de México. Al enterarse de su deceso, la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, envió una ofrenda floral como muestra de solidaridad en representación de todo el pueblo argentino.
Fuentes fue creador de una vasta obra de novelas, cuentos, guiones cinematográficos y ensayos, recibió los premios literarios más importantes en lengua castellana y sonó año tras año para obtener el premio Nóbel en sus cuatro décadas de actividad literaria. Su última distinción fue el doctorado Honoris Causa de la Universidad de las Islas Baleares, España, anunciada el lunes.
Hijo de un diplomático mexicano, Fuentes nació el 11 de noviembre de 1928 por azar en Panamá y pasó sus primeros años en Quito, Montevideo y Rio de Janeiro, hasta establecerse durante su educación primaria en Estados Unidos, alternándola con vacaciones en México, donde impulsado por su padre afianzó su español y la defensa de sus raíces mexicanas.
Escritor y diplomático, antiguo embajador en París, Fuentes, explicó en 2009 en el Salón del Libro en París, que su elección de escribir en español se debió a que hay "cosas que no podían decirse más que en español. Había una especie de tierra virgen para el escritor".
Entre sus obras más reconocidas están "La muerte de Artemio Cruz" (1962); "Aura" (1962); "Terra Nostra" (1975) y "Gringo Viejo" (1985).
A Fuentes lo sobrevive su esposa, la periodista mexicana Silvia Lemús, con quien se casó en segundas nupcias en los años 1970, unión de la que nacieron sus hijos Carlos Rafael, que padecía hemofilia y murió en 1999 a los 25 años, y Natasha que falleció años después a los 32 años.