Este lunes 1 de julio se realizó en la Casa Refugio Citlaltépetl una emotiva ceremonia de despedida a Laura Bonaparte, fundadora de Madres de Plaza de Mayo, luchadora incansable por los derechos humanos, psicoanalista y militante, quien falleció el pasado 23 de junio a los 88 años en Buenos Aires.
Laura sufrió en carne propia el genocidio, luego que los represores secuestraran y desaparecieran a tres de sus cuatro hijos, dos de sus yernos y a su ex marido. Desde su exilio en México, a fines de la década de 1970, inició una campaña internacional para que la “Desaparición Forzada de Personas” fuera declarada “Delito de Lesa Humanidad”.
La emotiva ceremonia estuvo organizada por familiares y amigos de Laura Bonaparte, con el apoyo solidario de la Casa Refugio y la Embajada Argentina. Al encuentro acudieron más de 100 personas, entre quienes se encontraban algunas reconocidas personalidades que compartieron con Laura su espíritu de lucha y la búsqueda incansable de Justicia como: Juan Gelman, poeta y periodista “argenmex”; Doña Rosario Ibarra de Piedra, activista mexicana; y Elena Poniatowska, activista y periodista mexicana.
También estuvo presente la Embajadora Patricia Vaca Narvaja, quien recordó a Laura como una mujer “muy alegre y con una luz impresionante. Luchadora incansable que contribuyó a lograr que en la Argentina finalmente se comenzara a transitar por ese camino de Memoria, Verdad y Justicia”.
La mejor manera de honrarla –señaló la Embajadora–, es recordándola con alegría y que todos sigamos trabajando para encontrar a cada uno de nuestros desaparecidos.
Durante la ceremonia se exhibió un video sobre la vida de Laura –producido por su nieta Natalia Bruchstein– y luego, amigos, familiares, compañeros y conocidos se acercaron a encenderle una vela a esta luchadora, para luego colocarlo en un altar.